En la medida en que cada persona va reconociéndose a sí mismo
como un ser con características propias, va desarrollando respeto a las diferencias individuales y
culturales que le permiten una convivencia armónica para proyectarse en la relación con los demás.
Para fomentar en los niños de sexto grado
D actitudes de respeto por sí mismos, por los demás y el medio ambiente, los alumnos
están trabajando sobre una experiencia que les permite ampliar el
conocimiento del entorno, porque para desarrollar respeto hacia él, hacia sí
mismos y la naturaleza en general, incluyendo sus
distintas formas de vida, es básico ofrecerles experiencias que les permita
conocerlo directamente, así
desarrollarán empatía y descubrirán que el ser humano es parte de un
sistema complejo y que cada elemento ocupa un lugar particular e indispensable.
El quererse a si mismo y valorar la vida
es la base para entender y expresar el trato que se le da a los demás y lograr
ponerse en los zapatos del otro .
Los estudiantes decoraron una botella
plástica reciclada, de tal manera que reflejara su personalidad, con esto se acondicionó
la maceta de la semilla que escogieron para ser plantada luego de garantizarle
todas las condiciones necesarias para su
crecimiento y desarrollo (riego,
y ubicación en un lugar seguro que permita que surja la vida ).
Posteriormente cada chico marcó una
ficha bibliográfica con la expresión REPRESENTO MI VIDA CON UNA PLANTA
DE………; escribiendo cómo quiere que
crezca esa planta, y finalizando con el compromiso ante lo realizado que
quedará plasmado con las palabras Te cuidaré y te querré.
Cada estudiante del curso 6D asesorado y
orientado por las profesoras María Paula Vélez y Marlen Veloza, docentes de Ciencias Naturales y Español respectivamente, realizará el seguimiento de la planta para así de esta manera evidenciar día a día la importancia
de cuidar la vida en todas sus manifestaciones, respetarla y valorarla.
